La relación entre el estrés y las alteraciones en el ciclo menstrual son bien conocidos:
- Síndrome premenstrual (Dolor en los días previos a la regla)
- Amenorrea (No baja la regla)
No obstante, hay síntomas vinculados a trastornos ginecológicos derivados del estrés que ni siquiera te habrías imaginado.
Uno de los más frecuentes es el dolor en la cara interna de la rodilla.
¿Cuándo duele el ovario duele la pierna?
No necesariamente.
A pesar de ello, un trastorno hormonal derivado del estrés puede afectar a la correcta función del ovario y esto puede dar síntomas en forma de dolor en la cara interna de la rodilla.
La función de los ovarios está regida por hormonas que proceden del cerebro.
En concreto de una regiones llamadas hipotálamo e hipófisis. Juntos forman el eje Hipotálamo – Hipófisis – Gónadas (HPG).
El buen funcionamiento de este eje depende a su vez de que haya un equilibrio entre los momentos de actividad, alerta, estrés y aquellos momentos de calma, recuperación y descanso.
Estas funciones las gestiona el sistema nervioso vegetativo que a su vez se divide en sistema nervioso simpático – SNS- (facilita la respuesta a situaciones de estrés) y sistema nervioso parasimpático – SNP- (situaciones de recuperación, descanso).
Si el estrés se hace crónico, es decir, se mantiene en el tiempo, provoca un desequilibrio en el sistema nervioso. Esto afecta al correcto funcionamiento del eje HPG.
Cuando esto ocurre, uno de los síntomas que podemos encontrar son alteraciones del ciclo menstrual, como hemos comentado anteriormente.
Hemos de entender que todas las vísceras (órganos) del cuerpo funcionan por un botón de encendido (ON) y un botón de apagado (OFF). Estos interruptores son el SNS y el SNP.
De forma que cuando hay una alteración del equilibrio entre los dos sistemas, por ejemplo por un estrés que se mantiene en el tiempo, esto afecta a los órganos a los que inervan.
Uno de esos órganos son los ovarios que tienen una inervación ortosimpática (del SNS) que viene del nivel medular L3 y una inervación parasimpática (del SNP) que viene del par craneal X o también conocido como nervio Vago.
En cualquier libro de anatomía podemos encontrar mapas de dermatomas, miotomas, esclerotomas… que son las regiones de la piel, músculo o hueso cuya sensibilidad es recogida por un determinado nivel de la médula espinal.
Podemos observar como el nivel medular L3 recoge la sensibilidad de parte de la zona lumbar baja, parte antero interna del muslo y cara interna de la rodilla.
Por lo tanto, un desequilibrio ginecológico que implique una disfunción en los ovarios puede provocar dolor en los ovarios y en la pierna. En concreto en la cara interna del muslo y rodilla.
¿Dónde te duele cuando tienes un quiste en el ovario?
Un quiste ovárico puede favorecer la aparición de dolor a nivel abdominal.
En concreto, justo debajo del ombligo y orientado a derecha o izquierda.
¿Qué puedo hacer si tengo un quiste en el ovario y me duele la pierna?
En primer lugar, debes consultar a tu ginecólogo para comprobar el estado del quiste.
Uno de los motivos más frecuentes por los que aparece un quiste es por desórdenes metabólicos como la resistencia a la insulina.
Por esto, será interesante revisar tus hábitos de vida por parte de un experto que te ayude a orientar el perfil de alimentos que debes ingerir, la frecuencia de comidas y actividad física, entre otros.
La psiconeuroinmunología (PNI) es una especialidad que puede ayudarte.
Además de esto, si el dolor en la pierna está provocado por el quiste en el ovario debido a procesos de convergencia medular, lo ideal es que contactes con un fisioterapeuta experto en osteopatía que apoye con terapia manual a la orientación con PNI.
Caso tratado en RIBER Center de dolor en la pierna por problemas de ovario
A continuación, exponemos un caso real de una mujer con dolor en la pierna por problemas de ovario.
Contexto del caso
Se trata de una mujer que hace ejercicio de forma regular siendo la actividad física una vía de escape al estrés que le genera su puesto como gerente de su propio negocio.
Problema que sufre la paciente
Desde hace 2 meses siente dolor intenso en la cara interna de la rodilla izquierda cuando realiza los gestos de lunge y burpee.
Exploración
Observamos un valgo de rodilla izquierda más acentuado.
Respecto a esto, nos comenta que usa plantillas desde hace 6 meses para corregir este valgo. Desde que las usa no refiere dolor en el trocánter ni en la cadera izquierda.
Tras las pruebas ortopédicas realizadas, descartamos lesión meniscal, ligamentosa o tendinosa.
Palpación
Dolor a la palpación de:
- Vértebras L3, L4 y L5
- Por debajo del ombligo hacia la izquierda
- En la sutura occipito-mastoidea izquierda (justo detrás de la oreja, siendo punto de salida del nervio vago).
Bloqueo en la articulación sacro-iliaca izquierda.
Entrevista en la clínica
Tras hacer varias preguntas, descubrimos que:
- La paciente ha sentido dolores recurrentes en el dermatoma de L3 y que se corresponde con la inervación de los ovarios.
- Sufre un cuadro de amenorrea hace un año que ha ido tratando con triptófano.
Tratamiento realizado en RIBER Center
Realizamos un abordaje con osteopatía craneal y visceral.
Resultados del tratamiento
Tras los ajustes realizados pedimos a la paciente que realice los gestos técnicos que le generaban dolor (lunge y burpee) y refiere no sentir dolor.
Tras una semana de la primera sesión ha podido ejercitarse sin dolor e incluso ha podido hacer el gesto de “air squat” que, según la paciente “hacía un siglo que no lo hacía por dolor en la rodilla”
En RIBER Center podemos ayudarte con problemas de dolor en la pierna y otros que condicionen tu día a día desde un enfoque global e integrativo.